Voulez vous danser avec moi?

domingo, 15 de noviembre de 2009

El partido de anoche entre la selección española y la argentina me trajo a la cabeza un año, 1978; este fue un año plagado de acontecimientos que pasarían a la historia, como la aprobación por parte de Las Cortes de la Constitución o el nombramiento de Karol Wojtyła como Papa de la Iglesia Católica bajo el nombre de Juan Pablo II..


En prensa y televisión, 1978 también tuvo gran importancia, puesto que fue el año en el cual se publicó la primera historieta de “Garfield” y en el que la cadena estadounidense CBS comenzó a emitir la afamada serie “Dallas”. Fue un año cargadito, pero yo particularmente recordé 1978 porque en el Festival de Eurovisión de Paris, José Vélez terminó en novena posición con la canción “Bailemos un Valls”.


Resulta que anoche volví a ver a José y su traje blanco, esta vez poniendo banda sonora a un partido que volvió a mostrar la mejor cara del juego de los españoles. En una noche de centenarios, los chicos de Vicente Del Bosque se pusieron a bailar desde el principio. Con pasos suaves y firmes, los Xavi, Iniesta, Villa y Cía. dibujaron un valls delicado y casi perfecto, era imposible que ninguno pudiera tropezar, salvo cuando Argentina se entretenía en dar alguna patadita que otra.


La única solución que Maradona tenía en mente para frenar el alubión de juego español era la del juego sucio, lleno de golpes, empujones y gritos, algo en lo que son los maestros, junto con Italia. A pesar de todo, esta marrullería era incomparable con la dulzura del valls español que recorría toda la pista de baile buscando siempre la mejor opción.


Por momentos pensé que era el Barcelona, de no haber sido por el escudo, y por Xabi Alonso. El donostiarra bailó más que ninguno, y no por sus dos goles, sino porque se le vio libre, despreocupado y disfrutando del baile con unos amigos, que lo hacen de maravilla. Sin embargo el estilo tosco de los albicelestes se logró imponer en la segunda mitad hasta conseguir empatar el partido. Muchos se quejarían de lo injusto que es el fútbol, pero un mundial no entiende de injusticias si quieres levantar el galardón de mejor país del mundo.


Y como la selección española es muy justa, pues decidió retomar el valls, con bailarines diferentes como Cesc, Mata, Negredo, o el esperadísimo Jesús Navas, hasta que llegó el penalty que les dio la victoria. Una victoria importante y que dará más seguridad si cabe a los jugadores españoles. El miércoles tocará bailar en la pista que nos dio la Eurocopa y seguró que seguirá sonando el “Voulez vous danser avec moi…”
E.C.

1 comentarios:

Fran López dijo...

Gran crónica. Lo único que le ha faltado ha sido hablar un poquito de Silva que también es un crack... FORZA VALENCIA!!!